Cómo funciona el sensor de presión de los neumáticos

 05/01/2021

 

Comprar neumáticos

 

Sensor de presión de los neumáticos: Nueva normativa.

Desde este mes de Noviembre, todos los vehículos que se presenten como nuevos en Europa deberán incorporar de forma obligatoria el sensor de presión de los neumáticos. Esta iniciativa legal se suma a normativas anteriores presentadas por la Unión Europea en favor de la seguridad en el coche, como la instalación del control de estabilidad, ABS, airbag del conductor y el etiquetado de neumáticos. Por ello, los fabricantes deberán incorporar este nuevo dispositivo en el equipamiento de serie de coches y vehículos industriales pequeños.

Lo que se pretende, es asegurar un correcto inflado de los neumáticos, ya que esto afectan directamente al ahorro de combustible y a la seguridad vial. Los sensores tendrán un receptor inalámbrico en cada una de las ruedas y un indicador visual o sonoro. que avisará al conductor, antes de iniciar la marcha, sobre el nivel de presión de los neumáticos.

Y recordad: Aquellos vehículos que no cuentan con el nuevo sensor, Euromaster recuerda la importancia de controlar la presión de los neumáticos al menos una vez al mes.

¿Qué es y cómo funciona?: 

Como hemos mencionado anteriormente, desde Noviembre de 2014 se ha implementado la obligatoriedad de que los nuevos coches vendidos en mercado europeo lleven este sensor de presión de los neumáticos. También llamado TPMS (Tyre Pressure Monitoring System) o sistema de monitorización de la presión de neumáticos. Todo ello, englobado dentro de un conjunto de elementos básicos de los sistemas de seguridad. Sumándose a los ya conocidos abs, airbags, cinturones, etc. 

Este sistema innovador funciona de la siguiente manera: 

Su principal función es la de avisar al conductor si por alguna razón, cualquiera de los neumáticos no tenga la presión recomendada. En aquellos coches cuya tecnología sea más sencilla, únicamente saltará el testigo de neumático del cuadro de mando, avisándole de que algo va mal. Pero desconocerá cual de las ruedas es la afectada. Aquellos vehículos más equipados tecnológicamente, además de mostrar la presión de cada una de las ruedas, en caso de tener algún problema con cualquiera de ellas, sabrá en cuál se está produciendo el fallo. 

La información acerca del estado de las ruedas se puede obtener de dos formas diferentes:

  • A través de medición indirecta: Aquella rueda que tenga menor presión, reflejará un menor diámetro que aquella rueda cuya presión sea óptima. Por lo que, al estar con un menor inflado, el movimiento será más lento y tardará más para recorrer la misma distancia. Con el TPMS y a través del sistema ABS, se sabrá qué rueda es la que gira más lento, y por tanto, descifrar cuál es la afectada. 
  • A través de medición directa: Este dispositivo monta en cada una de las ruedas un sensor de presión. Normalmente se tratan de sensores adheridos a la propia válvula, pero hay casos en los que se encuentra dentro del neumático. Cuentan con una bateria y cada sensor mide la presión y temperatura del neumático, enviando dicha información a la unidad de control.

Debemos decir que la medición directa es más fiable. Aparte de lo mencionado anteriormente, también detecta la posición de la rueda. Pero este tipo de método requiere mayor precaución y mantenimiento, ya que podemos romperlo cuando por ejemplo, cambiamos de neumático.